“Erotismo y poesía:
el primero es una metáfora de la sexualidad,
la segunda una erotización del lenguaje”
OCTAVIO PAZ
El erotismo es la poesía de la sexualidad humana, es invención y variación incesante. Se manifiesta en una infinita variedad de formas en todas las épocas y en todas las culturas. Aleja la monotonía de la sexualidad animal al trascenderla y transformarla.
La generalidad de los poetas, tanto hombres como mujeres, se han nutrido de la experiencia del placer, del deseo, de la pasión amorosa y la han nombrado según sus particulares obsesiones.
Denostada y olvidada en los manuales, en los estudios y en las antologías, la poesía erótica nos permite acercarnos de una forma amena y divertida, no sólo a alguno de los autores que hemos olvidado o dejado de leer, sino que nos sirve para comprender los usos y costumbres amatorios de cada época.
Vale decir que las palabras también exprimen, excitan sentimientos, más allá de sublimarlos y que toda poesía, en alguna dimensión, tiene su carga sensual, por ser humana.
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